Transparencia y austeridad en el gasto público

Es éticamente inadmisible que un Ayuntamiento casi arruinado y con alto niveles de morosidad -supera los 250 millones de euros-, después de años de despilfarro, mantenga en una situación de privilegio a una serie de personas (Equipo de Gobierno, concejales liberados, y múltiples cargos nombrados a dedo), con sueldos todos desproporcionadamente elevados al sueldo medio de la ciudadanía de Granada; además de la existencia de algunos funcionarios favorecidos por su proximidad al Partido en el poder, que doblan y a veces casi triplican sus sueldos mediante pagas extraordinarias que se les otorga por decreto de gobierno, impidiendo posteriormente una oferta de empleo público adecuada a las necesidades y que amplíe las posibilidades de empleo.

Es necesario igualmente desechar la practica abusiva de las concesiones y adjudicaciones de obras y servicios a determinados empresarios que las monopolizan, privilegiados por el poder, que sin la adecuada supervisión municipal, terminan por replantear al alza el dinero presupuestado dejando que desear la calidad del servicio prestado.

Es necesario recordar que al sueldo que figura en los presupuestos como remuneración del alcalde y los concejales hay que añadirles dietas, desplazamientos, gastos de representación, pertenencia a los consejos de administración de las empresas municipales, asistencia a esos consejos, plenos de ayuntamiento, comisiones, etc. con lo cual esos sueldos fácilmente se duplican.

El  índice  de  transparencia  de  los  ayuntamientos (ITA) del año 2010, que evaluó la transparencia de los 110 mayores Ayuntamientos de España, situó al ayuntamiento de Granada en el puesto 82 en cuanto a transparencia en la gestión municipal , obteniendo puntuaciones bajas en: información sobre la corporación municipal, transparencia económico-financiera y en transparencia en materias de urbanismo y obras públicas.

PLAN MUNICIPAL DE AUSTERIDAD Y TRANSPARENCIA EN LA GESTION 

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