LOS VERDES AFIRMA QUE EL PRINCIPAL PROBLEMA DE LA CIUDAD ES TORRES HURTADO

El portavoz de Los Verdes de Granada, Mario Ortega, ha hecho el balance de dos años de gobierno municipal calificando la gestión de "nefasta y sedentaria." Para Ortega el principal problema de la ciudad es su alcalde, pues "está entregado a la estrategia del PP de conseguir el poder en la Diputación y en la Junta sin importarle Granada." El portavoz verde tras un análisis detallado de los problemas de Granada desde el "punto de vista de la ecología política y la sostenibilidad" ha afirmado que Torres Hurtado "no gobierna", sino que "solo ejerce el poder".

En este sentido ha recordado todos los conflictos que tiene abiertos "sin vías de solución" como el que mantiene con los vecinos de Bola de Oro donde en vez de un parque "está enlosando y cementando el terreno", o el de los vecinos y los vendedores ambulantes que necesitan un espacio digno y estable para el mercadillo del Zaidín, aquí, dice Ortega está desmostrando una "tremenda incapacidad de buscar consensos ciudadanos".

Para reforzar sus planteamientos, el portavoz verde ha recordado que mientras ardía el monte del Serrallo, el alcalde solo pensaba en "lucir su palmito" en la procesión del corpus, una prueba mas de lo poco que le importa la ciudad.

Mario Ortega ha estado acompañado de Elsa Pombo, responsable de proyectos de Los Verdes, quien ha recordado que "para una vez que se consigue un amplísimo consenso ciudadano" como es el de la Plataforma por el Gran Parque Central del Milenio en Renfe, Hurtado sigue en la pelea con la Junta y queriendo enfrentar a todos con todos, siendo incapaz de comprender el significado económico, social y ambiental del proyecto.

El repaso de Los Verdes ha pasado por la política de vivienda y de empleo, por la privatización de la cultura y el deporte y ha alcanzado de pleno la destrucción del arbolado y la disminución de "las escasas zonas verdes", el ruido insoportable, la contaminación, la falta de una política de movilidad sostenible, los barrios abandonados, "ahí está el Albayzín", concluyendo que la ciudad "va a peor" porque tenemos un alcalde "un poco radical y un mucho conflictivo" haciéndole el trabajo a Arenas y a Sebastián Pérez sin pensar en Granada. En definitiva un gobierno agotado con un alcalde cansino que no asume su responsabilidad y solo le echa la culpa de todo a la Junta" sentencia Ortega.